Análisis del libro: El ambiente “Paradigma del nuevo milenio” de José Balbino León

    

El libro El Ambiente, “Paradigma del nuevo milenio de José Balbino León, primeramente trata de explicar las diferentes perspectiva que tiene el ser humano, de diversas culturas, sobre el medio ambiente.


Cuando se habla del surgimiento de una nueva ciencia, se dice que el hombre comenzó a experimentar con las tecnologías sin tomar en cuenta los daños que podría ocasionarle al medio ambiente. El hombre contagio con esa bisutería tecnológica, a toda una sociedad cegada en gran parte por esas tecnologías.


Después de este culto que la sociedad le da a las tecnologías, la misma comunidad científica, comienza a reconocer los errores y se da cuenta del daño que le estaba haciendo al medio ambiente con todo el proceso de industrialización. Hoy en día se tiene conciencia de eso, pero como ya no se puede volver al pasado José Balbino dice: Estas tecnologías se deben adecuar a las exigencias del medio ambiente.


Este libro dedica un capítulo para explicar la percepción que el ser humano tiene de la naturaleza, o de lo que entienden por naturaleza, como decíamos al principio cada cultura tiene su propia percepción de la naturaleza dependiendo en gran parte de las creencias, costumbres y valores que estos practiquen, y es en este punto donde esta perspectiva se vuelve mágico-religiosa. Un ejemplo de esto son algunos países asiáticos donde tienen por dios al sol, algo parecido es lo que hacen los Yanomami del Amazona para ellos su Dios es la luna, cuenta una anécdota que un día unos hombres visitaron esta tribu para conocer más su cultura, y cuando les dicen que el hombre ha llegado a la luna, ellos se ríen porque según sus ritos ellos van todos los días. Por otro lado está los relatos bíblicos, estos nos dice que en el principio, cuando Dios creó al hombre le dio la autoridad de dominar todo cuanto le rodea, además de multiplicarse. Es por eso que el hombre ha querido hacer y deshacer con la tierra, al punto de arriesgar su vida y su futuro.


El hombre por lo tanto ha tenido una percepción pasiva, y maligna de la naturaleza. El hombre como “Rey de la creación” puede actuar libremente, es por ello que la naturaleza no representa un hogar para él, sino un enemigo a vencer.


Además de esto el autor explica la relación entre naturalismo y economicismo, esto no es más que las medidas que el hombre ha tomado, para cuidar en parte la naturaleza y por otra la economía. De esta relación naturalismo-economicismo han surgido términos como ecológico, zoológico, reciclaje, conservacionismo, recurso. El hombre se da cuenta que ha vivido un poco a ciegas su relación con la naturaleza y pretende dar ciertas soluciones. Por eso el autor dice: “Percibir pues la naturaleza en términos económicos, implica aceptar la participación de las leyes”.


La ciencia, si bien es cierto, ha sido de gran ayuda para la vida humana, Sin embargo todos los descubrimientos y conocimientos científicos que ésta ha conseguido han sido puestos en manos inexpertas que popularizan los elementos de alteración y destrucción del ambiente. La ciencia ha colocado en nuestras manos poderosos y destructivos medios de intervención humana. Por su parte la existencia de gran variedad de campos disciplinarios de la ciencia, frente al problema ambiental, conllevan a utilizar métodos para reducirlos que distorsionan las soluciones. Todo esto ha contribuido a retardar la comprensión del ambiente produciendo falsas conceptualizaciones. Pero a qué se debe este efecto. La respuesta está muy clara. La ciencia siempre ha sido vista como el conocimiento real y verdadero, por lo que el mismo mito de la ciencia ha impedido que se realice una crítica bien fundamentada sobre ciertas desviaciones que ha conducido a la falaz y peligrosa situación que hoy atraviesa el medio ambiente.


Es evidente que la ideología cientificista contribuye a aumentar el problema ambiental pues la mayoría de las alteraciones que sufre nuestro ambiente son irreversibles, y lo peor es que ninguna ciencia presente o futura podrá devolver la estabilidad a los sufridos ecosistemas tropicales, es ahí donde nos damos cuenta la escaza posibilidad que tiene la ciencia para resolver el problema ambiental puesto que entre más busca la solución más logra agrandar el problema.


Con la aparición de la tecnología se buscan soluciones tanto para mejorar nuestra calidad de vida como para cuidar nuestro ambiente, sin embrago, la misma a traído consecuencias no muy alentadoras. En el caso de la agricultura el cambio tan grotesco de la forma de trabajar dejado a los agricultores como esclavos la tecnología, los cuales desconocen los procesos que se ejecutan. De esta manera ellos quedan con los menores beneficios a diferencia de cuando practicaban una agricultura más simple. Los tecnócratas han pasado por alto las potencialidades, capacidades de los ecosistemas y las tendencias sociales que en ellos se desarrollan, lo que en su mayoría ha conducido a una ruptura de los límites de tolerancia ecosistémica y elimina consecuentemente sus capacidades autoregulantes.


En el pasado siglo XX, cuando se dio la verdadera explosión de la ciencia y la tecnología comenzaron a evidenciarse los grandes problemas ambientales. Aunado a esto la ciencia hizo creer que tenía las soluciones cuando en realidad el principal interés era concretizar lo más posible el problema, creando así la sensación de que esto estaba siendo bien estudiado y que la ciencia estaba suficientemente capacitada para resolver estos graves situaciones. Sin embrago, muchas disciplinas como la medicina, la economía y la ingeniería buscan de cierta manera dar solución a la crisis ambiental, haciéndolo un elemento más a considerar contando con la contabilidad ecológica por ejemplo en el ámbito de la economía. Pero a pesar de esto se puede concluir que la ciencia ha sido incapaz de entender el problema del ambiente con la prontitud que el caso amerita.


La ciencia debe entender que para resolver el problema ambiental primero se debe comprender su concepción teórica. El objetivo principal está en alcanzar en un lapso corto, los elementos indispensables para conformar una teoría coherente del ambiente que conlleve a las acciones teóricas y pragmáticas que puedan ofrecer soluciones válidas.se busca ofrecer ideas preventivas para evitar los errores del pasado y poder llegar algún día a ofrecer la aplicación de su carácter proyectivo.